jueves, 19 de diciembre de 2013

La nueva cara de Stonehenge.

Se ha logrado a partir del cráneo de un hombre del neolítico que murió entre 3.630 y el 3.360 a. C., en Wiltshire el lugar donde se erigiría el anillo. Se expone en el nuevo Centro de Visitantes que se inaugura hoy.


Los restos del hombre del neolítico fueron hallados en 1863 en Winterbourne Stoke, Wiltshire, en la zona en la que se erige ahora el mítico conjunto de Stonehenge. Los arqueólogos y antropólogos concluyeron tras varias pruebas de radiocarbono que se trataba de uno de los moradores de la llanura de la región de Salisbury en el primer Neolítico, y que murió hace unos 5.500 años, un hecho de relevancia para los expertos, ya que el lugar de asentamiento se eligió 1.000 antes del anillo de Stonehenge, lo que significaría que ya tenía un significado especial ante de que se construyera. Ahora, un equipo de forenses ha puesto cara al primitivo bretón utilizando información obtenida del análisis de los huesos que además dará la bienvenida a los miles de turistas en el nuevo Centro de Visitantes construido en Stonehenge que se inaugura hoy y será expuesta junto al cráneo original. El nuevo edificio de Denton Corker Marshall ha costado 32 millones de euros y sustituye al antiguo recinto que databa de los años 60 y que dejará de usarse.

La reconstrucción facial es la más realista que se ha hecho hasta ahora, aunque existan opiniones diferentes sobre si es la más precisa, ya que los responsables de su apariencia final han reconocido que el color de sus ojos y pelo es una suposición que consideraban la “más probable” y no se sustenta en ninguna evidencia. No obstante, los forenses sí se han basado en pruebas científicas realizadas sobre su esqueleto para mostrar un hombre de en torno a 25-40 años de edad, esbelto, que debió pertenecer a la élite de su época. Sus huesos, bastante bien conservado, son poco habituales en restos de una época tan antigua, lo suficiente para obtener incluso muestras dentales que permiten obtener información valiosa sobre su paradero a lo largo de su vida. 
Así a través del estudio del esmalte de sus dientes los científicos aventuran que nació en el sudoeste de Inglaterra o aún más probable en el oeste de Gales, y que desde allí se trasladó con su familia a la edad de dos años a una zona con presencia de caliza, probablemente Wiltshire, el área de Stonehenge, lugar que abandonaría a la edad de nueve y al que volvería de nuevo con unos 11 años.

El estudio de su dentadura ha proporcionado otras evidencias que permiten conocer más aspectos sobre la vida de los primeros hombres de Bretaña del neolítico, aunque los expertos aseguran que se trataba de un hombre cuya estatura de uno 1,72 cm era superior a la de entonces 1,67 -la media actual en Inglaterra es de 1,76 cm-. Además, a diferencia de otros habitantes de esa época el análisis de isótopos de nitrógeno en sus dientes permite aseverar que su dieta era alta en proteínas animales -cabras, ciervos, cordero-. 
Se sabe que no sufrió ninguna enfermedad grave ni lesiones pero que murió relativamente joven de forma repentina. Su grandilocuente enterramiento dado el periodo le caracterizan como un personaje de importancia en la comunidad semi-nómada de su tiempo.

Su origen probablemente galés y sus estancias en Wiltshire permiten establecer junto con las piedras denominadas bluestones utilizadas en la construcción del anillo de Stonehenge también originarias de Gales un vínculo con el lugar, y que ya antes de erigirse el monumento se llevaron a cabo rituales, lo que significa que tenía una importancia especial con anterioridad a su construcción.

(Fuente: La aventura de la Historia. Autor: Julio Martín Alarcón).

1 comentario:

  1. Un atractivo más que añadir, si cabe, al gran misterio de Stonenhenge. Es fabuloso el avance de la ciencia forense aplicada a la investigación arqueológica de los últimos años y con qué detalle son capaces de reconstruir cadáveres de épocas remotas. Stonenhenge da para mucho y casi seguro que veremos más noticias y artículos relacionados con el monumento.

    Del hombre del neolítico, y dado que su enterramiento fue importante, tal vez fuera algún chamán o alguna especie de líder para la comunidad. Supongo que seguirán investigando al respecto. Y como anécdota, en cuanto he visto el rostro del hombre, me ha venido a la cabeza el actor escocés Peter Mullan: son clavados. ¿Tal vez su descendiente?:

    http://www.cadenaser.com/recorte/20100925csrcsrcul_3/XLCO/Ies/20100925csrcsrcul_3.jpg

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